aplicación de la formaciónFormación
La importancia de aplicar la formación
“Cualquiera que para de aprender se hace viejo, tanto si tiene 20 como 80 años. Cualquiera que sigue aprendiendo permanece joven. Esta es la grandeza de la vida”
(Henry Ford)
El conocimiento es un factor de producción que afecta a la competitividad de la empresa y de él depende su capacidad de innovar (condición indispensable para crecer en la economía del conocimiento). Innovar es convertir el conocimiento en riqueza, y el conocimiento se aporta y se transmite de forma importante mediante la formación.
El principal motivo por el cual es importante la formación del personal de una compañía radica en que, dicho personal adquiera conocimientos y nuevas competencias, porque son los trabajadores de las empresas quienes aportan ideas, realizan proyectos, para el buen funcionamiento de las compañías. Durante nuestros primeros años de vida nos dedicamos casi exclusivamente a aprender y a desarrollarnos ¿Por qué cuándo comenzamos a trabajar damos por hecho que la etapa de aprendizaje ya ha terminado?
Los empleados, cada vez más cualificados, serán más productivos y desarrollarán puestos más específicos con los que la empresa conseguirá ser más competente. En este sentido, la empresa no puede quedarse atrás y la formación tiene que ser una parte más del día a día del equipo.
El conocimiento de sus empleados es uno de los mayores capitales de la empresa y está en cambio continuo.
Modelo de formación tatum
Las actuaciones formativas que plantea tatum parten de la hipótesis, corroborada por una amplia experiencia de más de 25 años, de que todo cambio y/o evolución precisa de una actuación combinada en los 3 niveles en los que se mueve el adulto:
Cuando se diseña un programa de formación, por tanto, hemos de pensar en que estos 3 ejes han de estar presentes con mayor o menor intensidad. Se pensamos, por ejemplo, en “formar en productos” lógicamente el eje cognitivo estará muy presente, aunque también debería incluir un mínimo de puesta en práctica (conductual) y, obviamente, procurar una experiencia positiva del formando (emocional).
Ahora bien, los ejes generales del modelo de formación … ¿qué principios de actuación deben guiarlo, más allá de las grandes herramientas y/o canales que utilicemos para formar?
Pues para nosotros hay algunos principios a los que no deberíamos renunciar, como, por ejemplo …
Diseño e implantación de acciones formativas
En general un “programa de formación y/o entrenamiento” debe estar configurado en términos de cliente en las siguientes fases:
Ahora bien, desde el punto de vista del “formando” o destinatario final del programa, las “fases del programa de formación y/o entrenamiento” serían las siguientes:
New Blended Learning
Hasta hace muy poco los procesos de formación y entrenamiento en las empresas venían desarrollándose en lo que denominábamos “blended learning” … una combinación de actuaciones formativas presenciales acompañadas de entornos on line, para ampliar y completar las primeras.
En realidad, los principios de aprendizaje que hay detrás de este enfoque son los relativos a la formación “sincrónica” vs. la “asincrónica”. La formación sincrónica es la que se enmarca en un sistema de interacción en “tiempo real” (entre un formador y un participante, por ejemplo). Esta se solía producir en las sesiones presenciales en las que, por cierto, había que implementar un nivel “estándar” para todos los participantes.
La formación asincrónica es la que se produce “en diferido”, por ejemplo, cuando un participante entra en el campus virtual para acceder a un determinado contenido … o cuando el participante recibe una “píldora”, un micro contenido (que puede ser de “mera lectura” o que conlleve interacción con los microcontenidos correspondientes).
El shock que provocaron las medidas de confinamiento y el teletrabajo “forzoso” impulsaron a las compañías, “de la noche a la mañana”, a utilizar herramientas de videoconferencia. Expresiones del tipo “lo haremos a través de un webinar” o “lo haremos a través de zoom” son ya bastante coloquiales.
Entonces retomamos la formación de nuestros equipos, sin el componente presencial (alterando el mix del “blended learning”). Sustituimos nuestras “classroom” por las recientes “classzoom”. Es lo que podemos denominar el “New Blended Learning”.
Este nuevo escenario de aprendizaje en el que estamos (“New Blended Learning”) debe guiarse, más allá de las herramientas, formatos y canales, por los mismos principios de actuación que ya hemos comentado previamente (Enfoque Situacional, Enfoque Experiencial, Enfoque 70:20:10, Personalización/Individualización, Practicidad/Aplicabilidad, etc.).
En la actualidad estamos en condiciones de diseñar, implementar y desarrollar buenos programas de formación y/o desarrollo … con independencia del entorno en el que éstos tengan lugar. Para ello podemos utilizar multitud de “piezas” y herramientas que tenemos a nuestra disposición. La idea es hacer un planteamiento “sencillo” de implementar, que no requiera de grandes inversiones y que, por supuesto, tenga el impacto que necesitamos en los destinatarios de la misma.
Gamificación
La gamificación es un principio de aprendizaje que traslada la mecánica de los juegos al ámbito educativo-profesional con el fin de conseguir mejores resultados. Sirve para absorber conocimientos, para mejorar alguna habilidad concreta, para recompensar acciones específicas …
Desde la puesta en marcha de una acción formativa concreta, o de un programa de formación más global, los “formandos” podrán estar inmersos en una metodología “gamificada” cuyo eje más visible serán los “rankings” que se puedan establecer.
Estos “rankings” se irán conformando a través de los diferentes puntos que los “formandos” obtengan. Se pueden lograr puntos, por ejemplo, por subir por valorar los materiales formativos disponibles, por realizar preguntas al tutor, por responder a preguntas del tutor o de otros “formandos”, por ver/consultar el material disponible, …
Una de las posibles fuentes de obtención de puntos (y, por tanto, su plasmación en el ranking) serán los diferentes “KPI’s” que se hayan acordado al inicio del programa y que recogerán determinadas actuaciones o bien consecución de objetivos del propio “formando” en su día a día profesional.
Otra de las posibles formas de conseguir puntos será a través de la actividad e interacción que el “formando” tiene sobre las “píldoras” de formación.
Píldoras de formación
Las “píldoras” formativas son un formato de microformación donde establecer las bases del conocimiento. La practicidad y la corta duración son esenciales. Están pensadas para profundizar en temáticas concretas y en poco tiempo adquirir conocimientos específicos. Facilitan e impulsan la traslación al puesto de trabajo.
Las “píldoras” recrean situaciones apoyadas en la realidad del colectivo destinatario, o bien se centran en temas conceptuales que los “formandos” podrán visualizar. A pesar de ser de corta duración suelen producir un alto impacto al estar diseñadas bajo estándares pedagógicos multimedia de alta conectividad.
Ventajas de las soluciones formativas tatum
Las soluciones formativas que ofrece tatum, como hemos visto, cubren un amplio espectro de necesidades … tanto desde el punto de vista del cliente (programas y actuaciones integradas, cohesionadas, de alto impacto, pegadas a la realidad de los destinatarios, con altos índices de implantación/transferencia al puesto, con facilidad para realizar el seguimiento oportuno e introducir de forma ágil las modificaciones necesarias en un momento dado, …) … como desde el punto de vista del “formando” (actividades “experienciales” bajo el paradigma de “learning by doing”, con alta interacción entre los distintos participantes de los programas, con tutelas, apoyos y monitorizaciones personalizadas, con herramientas diferenciales, con la percepción de que son programas y actividades “con alma”, …).
A lo largo de los últimos 25 años los resultados obtenidos han confirmado el acierto de nuestro enfoque y, por tanto, en el ámbito de la formación desde tatum podemos ayudarte a:
- Diseñar programas de formación personalizados para dar respuesta a las necesidades formativas de los equipos.
- Trabajar en el desarrollo de las competencias, habilidades y destrezas, dentro de un marco organizativo estructurado, estable, integral, sostenible.
- Desplegar e implantar nuevas formas de trabajar, nuevos comportamientos o el uso de nuevas herramientas que mejoren el desempeño de los equipos.
- Realizar acompañamientos personalizados para impulsar determinados perfiles o ayudar a otros en los retos que se puedan encontrar en el día a día de su función.
- Crear entornos de aprendizaje para adaptarlos a formación presencial, e-learning o híbrida.
Recuerda: “Cualquiera que sigue aprendiendo permanece joven”.