Aunque el título sea un pelín “marketiniano”, no penséis que después de leer este post nos vamos a convertir en grandes líderes…entre otras cosas porque estoy convencido que ya lo sois.

Lo que quería reflexionar en este post con vosotros es sobre cómo la enseñanza, desde que somos muy pequeñitos, influye en la construcción de líderes.

En estos días de septiembre y con el inicio del nuevo curso escolar, nos toca asistir a las reuniones con los profes de nuestros hijos para que nos cuenten en qué va a consistir el curso.

Este año me ha llamado mucho la atención una nueva metodología de trabajo que van a utilizar en algunas clases para potenciar la colaboración y el trabajo en equipo… aunque para mí, van a conseguir fomentar algunas cosas más.

Hay varias dinámicas muy interesantes aunque os cuento una de ellas que consiste básicamente en hacer ejercicios en grupos de 4-5 alumnos donde tienen que compartir ideas, soluciones individuales y consensuar entre todos una respuesta de equipo que tendrán que argumentar y defender.

Me contaba mi hijo días después, que habían tenido la primera “asamblea” en la clase de Matemáticas:

– Nos lo hemos pasado genial (primer beneficio), nos hemos ayudado entre todos para hacer el problema (segundo beneficio) y luego, “el capitán de hoy” del equipo (tercer beneficio) ha tenido que salir a presentarlo a toda la clase (cuarto beneficio)…vamos a ir rotando hasta que los cuatro hayamos sido “capitanes” y hayamos salido a contarlo…y luego harán nuevos equipos. –

– Qué chulo – le contesté yo – pero, ¿y qué hace el capitán?

– Es el que se encarga de que tengamos a tiempo la solución del problema y luego tiene que contarlo a los demás de la clase – me contestó.

He de decir que me apetecería mucho asistir a una actividad de estas para ver cómo se desenvuelven los niños, que estoy seguro que lo harán mucho mejor que muchos de nosotros.

Con este tipo de actividades, ya desde el colegio, estamos potenciando muchas de las habilidades de las que luego podemos carecer cuando llegamos al mundo laboral…trabajo en equipo, liderazgo, comunicación…

Al igual que nos enseñan Matemáticas, Lengua, Ciencias…parecería importante poder recibir formación sobre las denominadas “habilidades” que tanto se demandan en las organizaciones.

Si revisamos, por ejemplo la parte de Liderazgo y Comunicación, resulta muy interesante que desde estas edades tempranas (6-8 años) se empiecen a potenciar estas habilidades:

• el “arte” de comunicar delante de personas (hablar en público) y el arte de que los niños desarrollen esta capacidad tan importante en el mundo laboral.

Creo fundamental que se potencie la habilidad de comunicar, el perderle miedo a estar delante de un grupo de personas, que se sepa argumentar y defender unas ideas (que ha generado el equipo), etc. … vamos, una de las necesidades más demandadas en las organizaciones.

• el manejo de “capitanear” un equipo y saber tomar una serie de decisiones.

En nuestros proyectos de implantación del Rol de Gestor de Personas, hablamos sobre pautas importantes a seguir por estos gestores y algunas de estas cosas, creo que se están consiguiendo trabajar con la utilización de estas dinámicas.

Por ejemplo, aprenden a dar protagonismo a todas las personas del equipo, trabajar con y para el equipo, saber escuchar las aportaciones de todos, comunicar y defender las ideas creadas por el grupo, exigencia en el cumplimiento del objetivo, etc.

Aprendamos de nuestros maestros, nuestros profes y utilicemos dinámicas diferentes que potencien el trabajo en equipo, la comunicación, el liderazgo, etc. de nuestros colaboradores.

Y si estas dinámicas nos parecen interesantes, apliquémoslas para que la reacción de nuestros equipos sea como la de los niños: “Nos lo hemos pasado genial, nos ayudamos entre todos …” y seamos influyentes en el desarrollo de nuevos líderes…además de ser unos excelentes Gestores de Personas.